POR LINDSAY MARTÍNEZ

“El correr de la sangre en mis venas es una danza de amor propio que me recuerda que estoy viva, que soy una, formada en una sola pieza”
Amasai
La primera ocasión que escuché la frase “Mo Cuishle” fue en la película “Million Dollar Baby”, la cual, aparte de ser un largometraje galardonado con más de cuarenta premios nacionales e internacionales, narra la historia de una boxeadora que al llegar a lo más alto de su carrera es reconocida en Europa por el sobrenombre de Mo Cuishle, una frase en gaélico que significa “MI AMADA, MI SANGRE”, frase que impactó mi vida y se convirtió en mi estandarte de sanación.
Sin embargo, no fue hasta muchos años después que, a través de la meditación, logré sentirme en una sola pieza, no esperando ser “Mo Cuishle” para alguien más, sino para mí misma, ya que hoy entiendo que en el proceso de sanación de la femineidad sólo se puede llegar al éxtasis de sí misma al poder unir las partes rotas o divididas.
La meditación clave para mí de ésta unión fue la técnica de Osho NATARAJ, la cual es una meditación basada en la danza que permite que toda división interna desaparezca quedando una presencia sutil y relajada.
Nataraj es una meditación activa que simboliza la energía del baile.
Esta meditación dura 65 minutos y tiene tres etapas, se hace con música específica que puedes encontrar como “OSHO Nataraj Meditation”, esta música señala y apoya energéticamente las diferentes etapas que a continuación te platico:
Primera etapa: 40 minutos
Con los ojos cerrados baila como si estuvieras poseído. Deja que tu inconsciente se ocupe de todo. No controles los movimientos ni seas testigo de lo que sucede. Solo entrégate completamente al baile.
Segunda etapa: 20 minutos
Manteniendo los ojos cerrados, acuéstate inmediatamente. Quédate inmóvil y en silencio.
Tercera etapa: 5 minutos
Baila celebrando y disfruta.
Con esta hermosa practica meditativa puedes lograr elevar tu nivel de conciencia para que veas, no solo lo que ocurre a tu alrededor, sino también en tu interior. Se trata de que reconozcas tus capacidades y tus límites, y llegues así a un alto nivel de autoconocimiento.
La meditación activa no sólo me permitió juntar las partes rotas en mi proceso de sanación ante la violencia sexual, sino a conectar con mi yo interior y mi energía vital. Adicionalmente, este tipo de práctica tiene múltiples beneficios como:
Ser consciente del ruido mental, para silenciarlo y enfocarnos en el presente.
Aumentar la capacidad de concentración, la cual permite un mayor rendimiento tanto a nivel personal como laboral.
Aprender a relajarse, con lo que se reduce el estrés.
Mejorar el estado anímico para sentirse con más energía, entusiasmo y autoestima.
Incremento en la capacidad de memorización.
Mayor estabilidad emocional.
Mejorar la calidad del sueño.
Mejorar la salud, ya que contribuye, a no contraer enfermedades.
Si en algún momento has sentido que tu valor, tu amor, tu ser, depende de la aceptación de un tercero, te digo, no hay nada más hermoso que reconocerse en una sola pieza, juntar las partes rotas y saber que Mo Cuishle es lo que eres para ti…” Mi amada, mi sangre”, sentir tu cuerpo desde el amor, el respeto, la danza creadora y descreadora de la energía de Shiva es sin duda, el éxtasis de empezar a experimentarte como parte de un todo, único y valioso.
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