por Karla Montero
El lugar no es lo más importante. La compañía no es lo más importante, mi rol no es lo más importante. Lo verdaderamente importante es cómo elijo vivir mi vida, la energía que comparto día a día, la intensión que impregno en mis acciones, el amor que me permito dar y recibir.
Los deseos nunca se acaban, el ser humano desea constantemente y es ese deseo el que nos ha hecho salir de las cavernas y buscar una vida cada vez más fácil y con menos esfuerzo. Los deseos no son malos, pueden ser grandes aliados que nos motiven e inspiren a avanzar; lo “malo” de los deseos es identificarnos completamente con ellos, basar nuestra felicidad y nuestro autoconcepto en su cumplimiento, pues los deseos no cumplidos generan frustración y sufrimiento.
En ocasiones el deseo se vuelve un espejismo, una falsa promesa de felicidad, una utopía de que la vida será mejor una vez cumplido el deseo. A veces vamos demasiado lejos buscando algo que ya tenemos aquí y ahora. La verdad es que la vida ya es maravillosa, ya es un milagro, ya es abundante, ya es puro amor aquí y ahora.
YO SOY lo único que realmente necesito para sentirme bien aquí y ahora. Mi libre albedrío me sirve para elegir entre sentirme bien conmigo o seguir buscando afuera lo que ya está en mi.
Así que… deseo y elijo vivir enamorada del dharma, disfrutando el camino, divirtiéndome incluso si caigo. Elijo aceptar lo que es, dejar de sufrir por quien soy y el papel que me ha tocado desempeñar en esta vida; sé que, al aceptarlo, lo agradezco y lo honro pues me reconozco infinitamente bendecida.
Me acepto y me agradezco con todas mis características de género, raza, religión, cultura, carácter y creencias, cada detalle es una pincelada en la obra de arte de mi vida, me hace única e irrepetible, me hace ser un regalo para el mundo y recordar que Dios no se equivoca y tampoco lo hizo al crearme con mi perfecta imperfección. Elijo aceptar y amar mi sombra.
Acepto y agradezco lo que tengo y lo que creo que me falta, las pruebas que la vida me ha puesto y los retos que no he logrado superar. Acepto y honro el camino que he recorrido hasta ahora pues, si bien no he llegado a mi destino final, tiene un gran mérito el haber llegado hasta aquí, a veces cansada, a veces sin ganas, a veces con dudas, quizá con miedo y, sin embargo, aquí sigo y sé que no me voy a rendir.
Acepto y bendigo la vida que me ha tocado vivir, con todas las pruebas que he tenido que enfrentar, con los retos, los aprendizajes; con todas las personas que me ha tocado conocer y todas las personas de las que me he tenido que despedir; con el equipaje que creí que tenía que cargar y la consciencia cada vez más clara de lo que puedo soltar. Deseo y elijo soltar el equipaje del dolor, de la carencia, yo no vine a sufrir y vivir en drama, no pienso elegirlo más.
Deseo y elijo disfrutar el viaje de mi vida, la aventura de lo nuevo y desconocido en cada paso sabiendo que aquí y ahora es todo lo que tengo y todo puede cambiar, aceptando la impermanencia y mi incapacidad para controlar nada más que mi libre albedrío, el cual cada vez uso con mayor consciencia y siempre se puede más. Elijo sentir que me rayé y la vida se rayo conmigo.
Siempre se puede más, siempre se puede elegir, ¿qué tomaría detenernos un momento en nuestra ajetreada vida para reflexionar en lo que estamos eligiendo y lo que realmente queremos elegir y manifestar? Hoy estamos en donde estamos gracias a las elecciones del pasado, todos tenemos el poder de manifestar nuestra vida, seamos conscientes o no, la estamos creando cada día, cada momento, con cada elección. Hoy será el pasado de tu futuro, el cual se volverá presente y sólo entonces te harás consciente de tu manifestación, así que cuida hoy tus elecciones: pensamientos, sentimientos, entornos y personas, todo está construyendo tu futura realidad.
¿Tu qué deseas a elegir hoy?
Karla Montero es comunicóloga de profesión, coach financiera y maestra de meditación. Brinda cursos, talleres y coaching personalizado acompañando a las personas a descubrir su potencial financiero y eliminar la escasez de su mente, de su corazón y de su vida con herramientas terrenales y holísticas pues está convencida de ser una Yogui Financiera en la búsqueda permanente del equilibrio y la integración del mundo espiritual con el mundo terrenal. Puedes encontrarla en Instagram, Facebook y TikTok como: @yoguifinanciera o mandarle un mensaje directo por WhatsApp al +52 5579705854