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Los problemas económicos no se resuelven con dinero

por Karla Montero



Los problemas económicos se resuelven dejando de pensar en la escasez y conectando con la abundancia que ya somos y merecemos manifestar.


Ser abundante es más un estado mental que una cantidad de bienes materiales. Ser abundante es tener de todo, más de lo que se necesita, -o se cree necesitar.

Hay gente tan pobre, que lo único que tiene es dinero, altas sumas en su estado bancario, pero con números rojos en su salud, sus emociones o sus relaciones personales. Por otro lado, hay personas con mucha unión familiar y salud, pero con viviendas humildes y poca plata.


Ser abundante es no tener que elegir unas u otras, sino tener un equilibrio en cada ámbito de la vida, pues no hay riqueza total sin abundancia en el alma, ni espiritualidad real sin recursos económicos.


Una persona abundante es capaz de disfrutar la vida, de reconocer la abundancia implícita en la naturaleza, en su propio cuerpo, en el mundo que vive. De cada persona depende que la abundancia se expanda en su vida compartiéndola con la gente que habita en él. Hay personas que trabajan doce horas al día y terminan sin tiempo ni energía para compartir con sus seres queridos. Otros se enfocan tanto en la diversión de la vida que jamás atienden sus obligaciones. Ser abundante, es mantener el equilibrio entre lo espiritual y lo terrenal, pues el creer que sólo puede haber uno de ellos, genera un desequilibrio y de ese desequilibrio viene el sentimiento de escasez.


Ciertamente, el saberse abundante y alcanzar la libertad financiera requiere compromiso. Aquí te dejo algunos consejos útiles para manifestar tu abundancia:

1. Cambia tu papel de “Consumidor” a “Productor”; esto precisa cambios importantes en tu manera de pensar. Principalmente es dejar de pensar “en qué voy a gastar” y cambiarlo por “Cómo voy a producir más”. Por ejemplo: los consumidores leen libros, los productores escriben libros; los consumidores compran ropa, los productores confeccionan ropa; los consumidores buscan empleo, los productores generan empleos. La realidad en este mundo es que sólo los productores se hacen ricos, pues su meta no es comer, sino generar alimento para los demás, con la consciencia de que en el proceso ellos podrán comer también ya que su interés está en ofrecer valor a través de sus productos y servicios.

2. Conoce el valor de tu tiempo. Divide el monto de dinero que ganas al mes entre el número de días trabajados y luego entre el número de horas que trabajas por día, considera el tiempo de traslados y comidas. ¿Estás satisfecho con el resultado? ¿Qué puedes hacer para incrementar esa cifra? ¿Puedes ganar más sin trabajar horas extras? Se trata de hacer más productivo tu tiempo sin sacrificar el valor y calidad de tu producto o servicio y mucho menos sacrificar tu nivel de vida.


3. Ten claridad en tus prioridades. Algunas personas se niegan a invertir en su preparación profesional, con lo cual podrían ganar más dinero, pero no escatiman en pagar la fiesta de cumpleaños de su hija tirando la casa por la ventana y gastando más de lo que ganan, para luego quejarse de lo difícil que está la situación económica. Su prioridad, aunque digan lo contrario, evidentemente no es mejorar su situación económica. Para determinar tus prioridades pregúntate: ¿Cómo cambiará mi vida con esta elección en 6, 12 o 24 meses? ¿Qué es lo peor y lo mejor que puede pasar si elijo esto? Muchas veces debemos rechazar la gratificación inmediata para no sacrificar lo que es realmente prioritario y trascendental para nuestras vidas.


4. Rodéate de personas y ambientes de abundancia. Y aléjate de personas tóxicas, problemáticas y que viven en la queja. Eres el promedio de las 5 personas con las que más te relacionas y tu energía se sintoniza con tu entorno. Busca rodearte de gente que tenga sueños, aspiraciones y metas afines a las tuyas, relaciónate con gente que esté trabajando para alcanzarlas, quizás no sean millonarias aún, pero están haciendo lo que les corresponde para lograrlo.


5. Pon tus talentos al servicio de la humanidad. Todos tenemos un don, algo para lo que somos muy buenos y la mejor manera de honrarlo es usándolo y compartiéndolo. Si no sabes cuáles son tus talentos y habilidades, descúbrelo, pregunta, experimenta, ponte a prueba, te aseguro que cuando lo descubras te darás cuenta de tu verdadero valor y tu gran capacidad para sobresalir.


El dinero es una herramienta maravillosa para vivir y te aseguro que hay más dinero en este mundo del que te puedas gastar en 100 vidas. Los problemas económicos tienen mucho más que ver con tu mentalidad respecto al dinero que con los números en sí, así que trabajando en estos puntos verás cambios significativos en tu economía y por supuesto, en tu autoconcepto de abundancia.


Karla Montero es comunicóloga de profesión, coach financiera y maestra de meditación. Brinda cursos, talleres y coaching personalizado acompañando a las personas a descubrir su potencial financiero y eliminar la escasez de su mente, de su corazón y de su vida con herramientas terrenales y holísticas pues está convencida de ser una Yogui Financiera en la búsqueda permanente del equilibrio y la integración del mundo espiritual con el mundo terrenal. Puedes encontrarla en Instagram, Facebook y TikTok como: @yoguifinanciera o mandarle un mensaje directo por WhatsApp al +52 5579705854

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